Noticias|26 mar 2015, 12:00 AM|5|POR Marvin del Cid
GUARDADO EN:Deforestación, parques nacionales, conservación, naturaleza
Diario Libre
Los límites invisibles del Parque Nacional Sierra de Bahoruco
.
Pedernales. Hace poco más de dos años, Diario Libre denunció la
deforestación en la zona de El Aceitillar en las faldas de la Sierra de
Bahoruco. En este punto el parque se une al Parque Nacional Jaragua.
Fue
notable en ese momento el poco control de las autoridades para detener
la agricultura ilegal, que por años ha afectado esta parte de la Reserva
de la Biósfera Jaragua-Bahoruco-Enriquillo. A solo pocos metros de la
caseta de entrada al parque, la tala y quema, además de las siembras de
auyama, habichuela, maíz, entre otras, son más que evidentes.
Hace poco menos de un año Diario Libre realizó un amplio artículo sobre
la elaboración y tráfico de carbón ilegal en la Sierra del lado norte,
con destino al vecino país. En esa oportunidad se documentó la
deforestación por esta práctica.
Esta vez, se usó lo último en
tecnología para visitar la parte sur, un drone de última generación dio
una vista impresionante, desde la perspectiva de las aves, de la misma
zona que recorrimos a pie hace dos años.
El Aceitillar
Luego
de las denuncias esperábamos ver avances en el control de la
deforestación de la zona y notar algún tipo de regeneración de la
vegetación de manera natural.
En un iPad se podían ver las imágenes que enviaba el drone en tiempo real, las noticias no eran buenas.
En la siguiente imágen en 360 grados se puede ver parte la zona deforestada en El Aceitillar.
Iniciamos
al este de la mina de bauxita, justo en donde los dos parques se unen, y
era evidente la destrucción de años anteriores, así también, como ha
ido avanzando sin detenerse. Lo que alguna vez fue un bosque seco, en
gran parte es roca y pequeñas islas de vegetación.
"Debería
ser deber de todo dominicano visitar Sierra de Bahoruco. Su importancia
debe ser vivida y no explicada. Sólo así podremos defenderla."
Mario Dávalos, publicista y fotógrado de naturaleza
"La
Sierra de Bahoruco, por lo aislada que se encuentra, nunca ha sido una
prioridad para las autoridades, y el día que vengan a despertar será
tarde. Para mi, La Sierra es una especie de Cristo: Vendida, saqueada,
quemada, maltratada , convertida en carbón y aún así ella resucita como
el ave fenix de sus cenizas, para brindarnos gratuitamente, todos los
tesoros endémicos escondidos en el corazón de este patrimonio de nuestra
isla.
José M. Pantaleón, médico y fotógrafo de naturaleza
Entre casas, camiones y cercos, hablamos con un grupo de
haitianos agricultores y nos cuentan que esperan las lluvias para
iniciar la siembra de habichuela y maíz para su patrón dominicano. "Al
patrón le damos cuatro sacos de cinco que cosechamos", aseguran.
A
lo lejos se veían varias columnas de humo hacia el oeste, no parecían
fuegos forestales, más bien pequeños focos de fuego preparando el
terreno para agricultura.
El Mogote
Unos pocos kilómetros al noroeste del poblado de Las Mercedes, donde el Ministerio de Medio Ambiente otorgó un permiso irregular que
destruyó parte del parque Jaragua, llegamos a una zona llamada El
Mogote. Esta zona se encuentra en el borde del Parque Sierra de
Bahoruco.
Pudimos ver varias columnas de humo hacia el norte y este, verificamos el GPS, estaban dentro del parque.
Drone
en el aire y aparecen un grupo de agricultores, curiosos por el ruido
del aparato volador. Conversamos con ellos unos minutos y al
cuestionarles sobre lo que hacen, nos dicen que acaban de prender fuego a
la loma, tumbar el bosque y preparar el conuco para la siembra cuando
lleguen las lluvias.
Sin
dudarlo un agricultor hace mención a los "dueños" de esos terrenos y de
que deben entregar cuatro de cada cinco sacos que cosecharán.
En esta captura del iPad podemos ver la deforestación
desde el punto del vista del drone. Abajo, inserto, el mapa de
navegación correspondiente al 2012. Existe una marcada reducción de la
vegetación.
Los Arroyos
Al
siguiente día subimos a la parte alta de la zona oeste del Parque,
conocida como Los Arroyos. En ese momento una brigada de 160 hombres del
Ministerio de Medio Ambiente, está terminando de controlar cuatro
incendios en el pinar, seis kilómetros al este, donde solo se puede
llegar a pie y mulo.
Aquí el parque es diferente, el bosque seco
queda abajo y da paso al húmedo, ahí donde las nubes chocan con la
Sierra. Es en este punto donde se concentra la mayor parte de
biodiversidad del parque, flora y fauna endémica, reciben a las aves
migratorias que encuentran en esta zona un hábitat para reproducirse,
desde antes que el hombre pisara esta isla. Un poco más arriba el
bosque húmedo cambia a exuberantes pinares.
La zona de Los
Arroyos es como un limbo, nadie tiene claro dónde está el límite del
parque. Nosotros tampoco estamos seguros dónde está la línea fronteriza,
no hay delimitación física. Nuevamente tenemos que usar el GPS para
saber si estamos fuera o dentro.
"Me
duele ver como la indiferencia de las autoridades agrava los males que
afectan al parque por su condicion fronteriza. Es urgente que se definan
los límites del mismo y que se respeten."
Pedro Genaro, fotográfo y conservacionista.
Los
bosques de la Sierra de Bahoruco no tiene el lujo del tiempo y
requieren de acciones firmes e inmediatas que busquen resolver el
problema de manera indefinida. Eladio Fernández, Fotógrafo y conservacionista
Es tan ilusorio que el letrero despintado de "Bienvenidos
al Parque Nacional Sierra de Bahoruco" que debería marcar el límite del
parque, está un kilómetro y medio parque adentro.
La
deforestación casi golpea el letrero de su lado sur, como quien dice
hasta aquí podemos cortar, pero luego de una curva más allá del letrero,
después de unos cuantos árboles, hay surcos y siembras de aguacate,
como desafiando las leyes. Es curuioso que la única palabra casi
ilegible es "Bienvenidos".
Es en este punto donde el drone se eleva de nuevo, en un
momento en que las nubes nos dan tregua. La vista es escalofriante, el
bosque está lacerado y en muchas partes la flora nativa ha sido
sustituida por aguacates de exportación.
"Ya
nos estamos haciendo a la idea que en 10 años no quedarán bosques
húmedos en la ladera sur de la Sierra de Bahoruco si no hay un cambio
radical en el manejo."
Yolanda León, Catedrática y bióloga.
"La
Sierra de Bahoruco es la reserva con mayor diversidad biológica de la
isla, es triste ver como la están destruyendo y alarmante el grado de
negligencia de las autoridades al respecto."
Héctor Vilorio, Fotógrafo conservacionista
"Siento
que estamos perdiendo un pulmón de la República Dominicana, al perder
la Sierra de Bahoruco. Invadida hoy por dominicanos y hatianos con doble
ilegalidad. La tala indiscriminada y la agricultura están dejando al
rojo vivo la tierra de Bahoruco. Todo esto por el poco interés del
Estado Dominicano."
Nicolás Corona, guía y biólogo de campo
La historia se repite, los agricultores mencionan por nombre a sus patrones, ignoran que están dentro de un área protegida.
Un
parque que no está delimitado inequivocamente, terratenientes que
reclaman esas tierras como suyas, inmigrantes que por un saco de
habichuelas están dispuestos a cortar lo que se ponga frente a ellos,
tal y como lo dejamos hace dos años.
En lo más alto de la sierra, en Loma del Toro, en el
bosque donde hubo un camino de tráfico de vehículos robados, donde solo
el GPS nos dice en qué país estamos, los restos de hornos de carbón nos
recuerdan lo que vimos hace un año y que sigue pasando.